8 platos típicos que tienes que probar en París

Viajar a Francia

Todo en París es una obra maestra. La cultura, el arte o la gastronomía. En nuestro post «Las 5 atracciones turísticas cerca de la escuela Lutece que no te puedes perder» hablamos de 5 monumentos y museos que forman parte de las mejores muestras de arte de París, e incluso Francia.

Sin embargo, París esconde muchos más tesoros que aquellos que se ven a simple vista. Entre ellos, su exquisita gastronomía. Famosa por ser el lugar de trabajo de algunos de los chefs más reputados de todo el mundo, por el sabor de sus especias y por su elaboración con los mejores ingredientes.

Si quieres conocer una cultura, probar su comida es una de las mejores maneras, y algo que a todo el mundo le gusta compartir. Como a todos los estudiantes que vienen a aprender francés en París, te encantará probar cosas nuevas y así adaptarte a la nueva cultura en la que te adentras.

Por tanto, si quieres aprovechar al máximo tu estancia y disfrutar de la calidad de nuestra gastronomía, sigue leyendo y descubre estos 8 platos típicos que tienes que probar durante tu aprendizaje de francés en París.

Soupe a L’Oignon (Sopa de cebolla)

Soupe a L'Oignon (Sopa de cebolla)

Esta sopa de cebolla, mundialmente conocida, es un plato emblemático de la cocina francesa y parisina. Aunque originalmente se consideraba un plato para gente humilde y pobre, hoy en día se ha convertido en una comida digna de servir a un rey. Cebollas doradas lentamente en mantequilla, caldo de pollo y delicioso queso que se extiende sobre una gruesa rebanada de pan tostado. Delicioso, ¿a que sí? ¡No puedes irte sin probarlo!

Pot au Feu

Pot au Feu Paris

Se considera la estrella de la cocina francesa y es un símbolo de la historia de Francia. Los orígenes y cambios en la elaboración de este plato reflejan los cambios históricos de la propia Francia. Comenzó siendo elaborado por las clases sociales más humildes y pasó a ser la pepita de oro de la aristocracia, logrando unir a todas las clases sociales por el amor hacia un solo plato. ¿Cuáles son sus ingredientes? Un guiso contundente a base de tuétano o rabo de toro y tubérculos, condimentado con especias.

Escargots (Caracoles)

Escargots (Caracoles)

Caracoles. Aunque para los españoles no es un plato extraño, en muchos otros países sí que lo es. Este plato es muy popular en París y en Francia en general. Si no los has probado, la realidad es que saben mejor de lo que parece. Los caracoles se cuecen en el horno y se sazonan con ajo, perejil y mantequilla. Si te gusta probar sabores diferentes, ¡los caracoles pueden ser un gran descubrimiento!

Coq au vin (Pollo al vino)

Coq au vin (Pollo al vino)

Para los amantes del vino y el pollo. El coq au vin es un guiso tradicional parisino elaborado con pollo y aderezado con vino tinto o blanco.

Las verduras le dan el toque final: la cebolla y el laurel le dan un sabor increíble. ¡No dudes en añadir este plato a tu lista de «qué comer» en París!

Foie-gras

Foie-gras

Este popular plato se describe como rico, delicado y de sabor mantecoso. Es un alimento de lujo en Francia y se elabora con el hígado cebado de pato o ganso. El animal es alimentado con grandes cantidades de maíz hasta que su hígado se engrasa y adquiere el suave sabor a hígado. ¡Una auténtica delicatessen!

Mille-feuille (Milhojas)

Mille-feuille (Milhojas)

La joya de la pastelería francesa está compuesta por tres finas capas crujientes rellenas de crema pastelera. Dulce y exquisita. La Mille-feuille te hace la boca agua con solo verla y es perfecta como un postre para degustar con los compañeros de clase mientras aprendes francés en París.

Ratatouille

Ratatouille France

Este plato típico francés es una mezcla de verduras: cebolla, berenjenas, tomate, calabacín y pimientos. Aderezado con ajo, orégano y aceite. Es una delicia para cualquier turista, sea o no vegetariano.

Macaron

Macaron

Hay dos maneras de hacer macarons: con el método francés o con el método italiano. En el método francés se baten los huevos blancos con el azúcar, hasta que estén lo más duros posible. A continuación, se añade harina de almendra y azúcar en polvo al merengue para formar una masa. Su sabor es tan delicioso como parece.

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